"Born a Solja" es una pieza musical del artista Crackerz, cuyo estilo refleja la realidad y las luchas de la vida en la calle. Aunque carecemos de información sobre el álbum al que pertenece o sobre el compositor, la esencia de la canción es resonante y profunda, lo que nos permite ver un atisbo de las vivencias del autor.
La letra aborda temas recurrentes en el hip-hop, como la violencia, la lucha por sobrevivir y el anhelo de un futuro mejor. Desde el inicio, se establece un tono crudo e impresionista que retrata una vida dura: "Livin a life ov a thug, born ruff rugged". Esta línea inicial sugiere no solo una identificación con una cultura marginal, sino también una aceptación de las dificultades inherentes a esa vida. La frase "not givin a fck" resuena con desdén y resistencia ante un sistema que muchas veces parece estar en contra del individuo. Este espíritu desafiante se ve reflejado en la repetición del término "born a solja", simbolizando no solo el origen del artista en este entorno violento, sino también su lucha constante para mantenerse erguido frente a adversidades.
A medida que avanza la canción, encontramos un contraste entre los sueños y la cruda realidad. El soñador aspecto se presenta en líneas como "Dreamin ov better days", donde anhela días más tranquilos y posibilidades de mejora frente al caos cotidiano. Sin embargo, esta aspiración choca con una visión sombría; "i dont even kno if my lifes 4 keeps" expresa incertidumbre acerca de su propio futuro y valor existencial. Aquí surge un mensaje profundo: aunque hay anhelos de paz y felicidad, los factores externos —como el miedo a ser arrestado ("hopin I ain't gona get poped or locked by da cops")— son abrumadores.
El sentimientoismo se intensifica cuando menciona su necesidad de despertar a la realidad, significando quizás una lucha interna entre continuar viviendo en fantasías inalcanzables o aceptar su situación actual. La metáfora de “Lifes a rollercoaster” ilustra bien esta dualidad: momentos altos seguidos por descensos abruptos y desafiantes. Esta comparación no solo refleja las experiencias vividas por muchos jóvenes inmersos en realidades difíciles, sino que además trae consigo un matiz irónico; aquellos altibajos que deberían ser emocionantes pueden convertirse rápidamente en angustiosos.
La oración final —“lord help me”— encapsula el clamor humano por asistencia divina y esperanza ante las adversidades cotidianas. Se manifiesta así la vulnerabilidad del narrador; esencialmente es una súplica por redención y cambio.
En términos curiosos sobre "Born a Solja", vale mencionar que su publicación datada en diciembre de 2011 coincide con tiempos donde los sonidos urbanos comenzaban a intensificarse globalmente. Esto permitió al rapero encontrar resonancia dentro de comunidades más amplias buscando identificarse con historias genuinas provenientes del asfalto.
Conclusivamente, esta obra no simplemente canta historias tristes; plantea preguntas esenciales sobre identidad, supervivencia y esperanza entre las sombras que caracterizan vidas marcadas por el entorno urbano hostil. Crackerz presenta sus experiencias no como únicas sino representativas para muchos otros artistas e individuos atrapados entre situaciones similares; sugiriendo así que cada voz cuenta en el gran relato humano acerca del deseo universal por mejorar cualquier condición adversa.