"Viva Tlapehuala", interpretada por el grupo Tlapehuala Show, es una canción que celebra la identidad y cultura del municipio de Tlapehuala, en el estado de Guerrero, México. Aunque no todos los detalles sobre la canción están disponibles, se puede inferir que su origen radica en la tradición musical popular mexicana, influenciada por ritmos folklóricos y el mariachi, lo cual es característico en obras de esta procedencia. La composición también parece tener un fuerte componente comunitario y festivo.
La letra de "Viva Tlapehuala" transmite un profundo sentido de pertenencia y aprecio hacia las raíces culturales del lugar. Desde el inicio con "Viva Dios que es lo primero", se establece un tono reverente que refleja la religiosidad presente en muchas comunidades mexicanas. Esta frase inicial no sólo agradece a Dios, sino que también sitúa a la divinidad como el centro alrededor del cual gira la vida comunitaria. Al mencionar la ciencia otorgada a Tlapehuala, se alude tanto al conocimiento tradicional local como a las tradiciones que han sido preservadas a lo largo del tiempo.
El repetido “Ay, ay, ay” resuena como un lamento o un grito de alegría típico de las letras populares. Este tipo de expresiones son muy comunes en la música tradicional mexicana y añaden un carácter emotivo y festivo a la canción. A través de versos como "aunque ande ausente de ti / no creas que yo te olvido", se percibe una reflexión sobre la nostalgia y el vínculo inquebrantable con las raíces culturales, sugiriendo que incluso aquellos que se encuentran lejos de su tierra natal mantienen una conexión íntima con ella.
La línea “señores con alegría / les cantaré por escala” refuerza el propósito celebratorio del tema; es una invitación para unir voces y corazones en torno a costumbres compartidas. La referencia específica a “la sombrerería” puede interpretarse como una mención metafórica a uno de los productos tradicionales o artesanías locales típicas del área, resaltando así el orgullo por los oficios e identidades locales.
Este tipo de canciones suelen servir no solo para entretener, sino también para recordar valores importantes dentro de la comunidad: unidad, tradición y resistencia cultural frente a los cambios externos. El hecho de que esté compuesta para ser cantada junto a otros acerca su espíritu colaborativo y colectivo.
En cuanto a datos curiosos sobre "Viva Tlapehuala", vale mencionar que su estilo musical refleja prácticas tradicionales arraigadas en Guerrero y en otras regiones rurales mexicanas donde se hace muy presente el uso instrumental variado así como juegos vocales festivos. Su recepción crítica ha sido positiva entre quienes valoran las raíces folklóricas nacionales.
En este sentido, "Viva Tlapehuala" no solo actúa como un himno local sino también como un recordatorio constante del valor cultural intrínseco encontrado en cada rincón del país mexicano. Con su mezcla alegre entre tradición e identidad moderna, se convierte así en un vehículo formidable para transmitir valores intergeneracionales dentro de las comunidades hispanohablantes contemporáneas y más allá. Esta obra musical reitera cómo las canciones pueden funcionar como portadoras vivas de historia narrativa colectiva mediante las cuales sus intérpretes conectan momentos pasados con presentes diversos.