"Ama, ama, ama, y ensancha el alma" es una de las canciones más emblemáticas de Extremoduro, una banda española reconocida por su estilo inconfundible que fusiona rock con letras poéticas y profundas. La canción forma parte del álbum "Grandes éxitos y fracasos", una recopilación que refleja la trayectoria de la banda. En esta pieza se puede apreciar la destreza compositiva del vocalista y líder del grupo, Roberto Iniesta, quien ha sido el principal artífice de muchas de las letras memorables del conjunto.
El significado de la letra es profundo y trascendente. A través de sus versos, el artista plantea un grito a favor del amor y la libertad, en un mundo que a menudo se ve dominado por valores como el odio y la avaricia. Esta contraposición entre lo materialista y lo espiritual es un hilo conductor en toda la canción. La metáfora sobre querer que su voz resuene fuerte como para hacer temblar montañas indica un deseo ferviente de ser escuchado en medio del ruido social. Es un llamado a despertar las "mentes-social-adormecidas" – una clara crítica a la conformidad que premia los intereses individuales sobre el bienestar colectivo.
La evocación al amor como motor universal se refuerza cuando expresa su deseo de " amores, lágrimas y sonrisas". Aquí se plasma un mensaje esperanzador: si todos compartiéramos nuestras emociones auténticas, podríamos construir un mundo más empático. Se nota también cierto desencanto respecto a las expectativas tradicionales impuestas desde pequeños; el narrador prefiere identificarse con lo libre e indomable ("un indio") lejos de los clichés asociados al éxito material. También resuena una crítica hacia el camino "social alquitranado", sugiriendo que este obstáculo limita nuestra capacidad para volar libremente.
El uso de imágenes sencillas pero poderosas otorga a la letra un carácter accesible, permitiendo que cualquier oyente sienta su mensaje en lo más profundo. A través del rechazo consciente a tener unas aspiraciones superficiales típicas del estatus social –“me educaron para hombre adinerado” – aparece otro tema recurrente: la búsqueda de autenticidad y conexión genuina con uno mismo y los demás.
En cuanto a datos curiosos sobre esta canción, cabe mencionar cómo Extremoduro ha logrado captar la atención no solo en España sino también entre amantes del rock hispanoamericano gracias a su lírica provocativa y su música intensa. La recepción crítica ha variado desde alabanzas por su sinceridad lírica hasta críticas por su estilo directo; sin embargo, esto nunca ha mermado su popularidad ni relevancia cultural.
El proceso creativo detrás de “Ama, ama…” recuerda cómo artistas como Iniesta añaden capas significativas a sus obras mediante experiencias personales transformadas en universales. Esto permite que cada oyente reinterprete los versos desde perspectivas propias, convirtiendo así cada escucha en una experiencia única.
A lo largo del tiempo, “Ama, ama…” ha resonado con diversas generaciones e incluso hoy sigue siendo relevante por sus valores intrínsecos tan humanos como son el amor fraternal y el deseo sistemático de libertad personal frente a las imposiciones sociales. La canción invita constantemente a reflexionar sobre cuánto hemos permitido que esas imposiciones afecten nuestro ser interior y nos anima también a salir del conformismo e incluso alzar nuestra voz ante ello.