"Ayer vi un ovni" es una obra del conjunto argentino Yayo y el cuarteto obrero, que se inscribe dentro de la música popular. Esta canción destaca tanto por su letra cargada de humor como por su enfoque en la cultura popular argentina, con referencias que pueden resonar profundamente entre sus oyentes.
Desde el primer momento en que escuchamos “Ayer vi un ovni”, queda claro que estamos ante una pieza que desafía las convenciones tradicionales de la música. La letra es un collage de situaciones cotidianas y absurdos, donde un "ovni" se convierte en el hilo conductor para narrar una serie de viñetas urbanas. Este recurso permite a los oyentes viajar rápidamente a través de diferentes escenarios, desde la banalidad del día a día hasta lo fantástico, utilizando el humor como principal herramienta.
La repetición de frases como "ayer vi un ovni, me hizo una roncha" refuerza no solo el absurdo del relato, sino también establece una conexión emocional con aquellos momentos inesperados que la vida nos presenta. Este "ovni" puede interpretarse metafóricamente: representa lo desconocido y lo extraño en nuestras vidas cotidianas, recordándonos que lo efímero siempre puede surgir cuando menos lo esperamos. Hay cierta ironía presente al situar lo extraordinario (un ovni) junto a situaciones tan ordinarias como ver a alguien pintar o viajar en colectivo. Aquí podemos ver cómo Yayo y el cuarteto obrero juegan con los contrastes entre la realidad y la imaginación.
El uso del lenguaje coloquial añade familiaridad a la letra y crea una sensación de cercanía entre el artista y su audiencia. Este estilo conversacional evoca imágenes fuertes del argentino promedio; nombres y lugares específicos hacen eco en quienes comparten o conocen esos contextos culturales. Así, la canción trasciende al mero entretenimiento musical: se convierte en un relato social cargado de crítica implícita sobre las vicisitudes diarias.
La estructura repetitiva también cumple una función importante. A medida que avanza la canción, frases simples van sumándose unas sobre otras al tiempo que son alteradas ligeramente o mezcladas incluso con palabras en inglés. Este estruendo sonoro refleja quizás un juego similar al del caos urbano donde se desenvuelven muchas vidas; ese ritmo acelerado puede incluso parecerse a las aglomeraciones típicas del transporte público o del bullicio citadino. Se incorpora además un sentido casi lúdico consigo mismo, como si invitaran al oyente a unirse al juego verbal sin preocupaciones por encajar.
Entre los datos curiosos acerca de "Ayer vi un ovni", cabe destacar cómo fue recibida esta obra por parte del público argentino; gozó de popularidad especialmente por su impronta humorística y lúdica, reflejando aspectos característicos de su cultura. La mezcla entre elementos improvisados y voces familiares atrae tanto a jóvenes como adultos, generando ese cruce generacional propio de las buenas obras populares.
En conclusión, "Ayer vi un ovni" es más que una simple canción; es una representación dinámica del espíritu urbano argentino vista desde el prisma del humor absurdo. Utilizando imágenes cotidianas combinadas con toques fantásticos e ironía, Yayo y el cuarteto obrero nos recuerdan cómo lo extraordinario puede aparecer sin aviso mientras navegamos por nuestros días llenos de rutina junto a sus peculiaridades absurdas e hilarantes.