Dice la canción

Lo segundo, el talento de Rayden

album

Sinónimo

8 de febrero de 2019

Significado de Lo segundo, el talento

collapse icon

"Lo segundo, el talento" es una de las composiciones más destacadas de Rayden, un artista español que ha logrado fusionar magistralmente elementos de hip hop y rap en su trabajo. Este tema se encuentra en su álbum "Sinónimo", lanzado el 8 de febrero de 2019. La canción no solo refleja la habilidad técnica del rapero, sino que también presenta una profunda conexión emocional que resuena con un amplio espectro de oyentes.

La letra de "Lo segundo, el talento" explora temáticas universales como la resiliencia y la superación personal. Desde el comienzo, la canción invita a reflexionar sobre la naturaleza transitoria de las dificultades: “No hay mal que no pase”. A través de estas líneas, Rayden sugiere que los momentos difíciles son simplemente etapas pasajeras en la vida. Esta actitud positiva se refuerza cuando anima a quienes lo escuchan a levantarse tras caídas: “Me han tumbado y aprendí / Que el fin no es el final / Si cien veces me caí / Me vuelvo a levantar”. Este mensaje se torna vital en una sociedad donde los fracasos suelen ser estigmatizados.

Uno de los puntos más interesantes que analiza esta pieza es cómo Rayden se permite lucir vulnerable al admitir sus propias luchas internas: “Huyendo de mi sombra, forjando este martillo.” Aquí, alude al proceso creativo y a cómo las experiencias dolorosas pueden transformarse en herramientas para salir adelante. Esta metáfora del martillo simboliza resistencia y fuerza ante las adversidades. Además, el artista destaca la importancia del contraste emocional; al mencionar días soleados después de tormentas o nevadas, ilustra cómo valorar los buenos momentos requiere experimentar lo malo.

La ironía en algunas partes del texto también resulta significativa. Por ejemplo, menciona “la felicidad pasiva” como algo superficial; esto revela una crítica hacia expectativas sociales sobre cómo deberíamos sentirnos constantemente alegres. Al reconocer que experimentar tristeza forma parte del camino hacia la sanación genuina, Rayden plantea un enfoque realista y honesto acerca del bienestar emocional.

Entre los datos curiosos sobre esta canción se puede señalar cómo ha sido recibida por crítica y público. La combinación magistral entre ritmos dinámicos junto con letras cargadas de significado ha permitido que este tema resuene especialmente entre jóvenes escuchas buscando empatía y orientación en sus propias luchas cotidianas. Además, hay un elemento distintivo en su estilo narrativo: utiliza repetitivas frases como “mataria por el A” para enfatizar su determinación hacia sus objetivos; esta insistencia crea casi un mantra personal dentro del marco general de lucha contra las adversidades.

En conclusión, "Lo segundo, el talento" representa más que una simple frase musical; encapsula un viaje completo y multifacético a través del sufrimiento y la perseverancia humana. Con metáforas concretas y evocaciones sinceras, Rayden establece un puente entre su propio mundo interior y aquel de oyentes que enfrentan batallas similares. La forma sincera en que comunica sus experiencias emocionales permite crear una conexión auténtica con quienes encuentran consuelo e inspiración en sus palabras.

Interpretación del significado de la letra realizada con IA.

No hay mal, te repito, no hay mal que no pase
Sólo es una etapa, sólo es una fase en la que crees
Que todo se acaba y se detiene pero es un traspiés
No mires atrás, sigue y ponte en pie, sígueme

(Uhh) Sígueme
(Uhh) Sígueme
(Uhh) Sígueme
(Uhh)
(Uhh) Sígueme
(Uhh) Sígueme
(Uhh) C'est la vie

Coge aire y sácalo todo fuera
Sécate la pena y vive ya que la vida no espera
Límpiate la cara y ríe como si te lo prohibieran
Ríe como si eso les jodiera y no doliera
Hazlo por los que no pueden
Y soporta el yugo de los días cuando llueve
Para que así aprecies el valor que tiene el sol cuando llegue
Y recuerdes su calor cuando haya nieve
También he vivido al borde del filo
Rozando el trastorno pasivo-agresivo
Tapando el mordisco, imitando su ladrido
Haciendo mi castillo ladrillo a ladrillo
Huyendo de mi sombra, forjando este martillo
Un martillo que golpea esperando que me rompa
Como la rama rota que aun así soporta
El árbol cuando tiene el viento en contra

Me han tumbado y aprendí
Que el fin no es el final
Si cien veces me caí
Me vuelvo a levantar

Me he tirado media vida en la utopía
Con un ojo vago, forzado a sólo ver la visión positiva
Y eso es perderse medio cuadro
Vivirla sin profundidad, mirar hacia otro lado, a otra huida
La felicidad pasiva, edulcorada
Esbozando una sonrisa fija, casi grapada
Forzando hasta la carcajada
Vaya espanto da la risa que maquilla al llanto cuando lo enmascara
A ver si os entra en la cabeza
Que también lo negativo reporta entereza
Que si no sabes qué ponerte sobreponte y ponte en pie
Imponte a cada uno de los golpes que te den
Que no hay mayor proeza que el alegre empedernido
Que aunque abrace la tristeza nunca hace de esta un nido
Vive aunque te joda o, más bien, jódete la vida
Y si no puedes hacer nada, hagamos ruido

Me han tumbado y aprendí
Que el fin no es el final
Si cien veces me caí
Me vuelvo a levantar

Eh, puedo perder
También aprender cómo saber ganar
Puedo volver pero no hay marcha atrás
No tengo plan B, mataría por el A
No tengo plan C, mataría por el A
No tengo plan D, mataría por el A
No tengo plan E, mataría por el A
El sueño de ayer, hoy es mi realidad
Ni F ni G, mataría por el A
Ni H ni I, mataría por el A
Ni J ni K, mataría por el A
El sueño de ayer, hoy es mi realidad
Ni L, ni M, ni N, ni O, ni P, ni Q, mataría por el A
Ni R, ni S, ni T, ni U, el sueño de ayer, hoy es mi realidad
No tengo plan V, muero por el A
Tampoco W, muero por el A
No tengo plan X, muero por el A
El sueño de ayer, hoy es mi realidad
Ni plan Y, muero por el A
No tengo plan Z, muero por el A
Ni alpha, ni gama, ni beta, con todas las letras
Yo soy mi puta realidad

0

0